Comedores en color blanco y negro

A la hora de decorar una comedor tenemos que pensar cual será el estilo a emplear. Moderno, rústico… Si nuestra decisión es el diseño de comedor clásico, aquí van dos colores que lo representan a la perfección, el blanco y el negro. Ambos son completamente opuestos, pero una vez combinados, otorgan una elegancia al entorno perfecta, siendo la luz la que juegue el papel más importante. Cualquiera de los dos que sea el dominante, debemos tener en cuenta que los matices o contrastes que queramos introducir, serán muy llamativos, ya que un color sobre el otro hará que resalte de una manera extraordinaria cualquier elemento por mínimo que sea, así que hay que tener claro cual será el mueble o accesorio decorativo que queremos que focalice la atención en la decoración del comedor. A continuación algunas ideas para decorar, fotos de comedores en color blanco y negro, hermosos y elegantes diseños de interiores.

Vemos un diseño de comedor en el que destaca el contraste negro y blanco. Un estilo de decoración así no deja de lado cualquier otro tipo de elemento que queramos introducir como por ejemplo el color dorado como vemos en la cabecera de la chimenea.

Una ambientación clásica con muebles modernos y el contraste entre el blanco y el negro apartando elementos de decoración, como los decorativos en negro y los que serán usados en blanco.

Un elegante comedor con tintes modernistas en el que vemos como el color negro se apodera de prácticamente toda la superficie dejando que sea el color blanco quien ponga la nota de color en las ventanas.

Una buena manera de obtener un contraste perfecto entre estos dos colores es combinarlos en diferentes elementos. Como vemos, tanto en los muebles como en las sillas ambos colores juegan complementándose.

Un hermoso diseño de comedor en el que es el color blanco quien pone la base y el color negro quien se aposenta sobre el lienzo dejando que sea su natural elegancia quien llene nuestro cuarto.

En esta foto de decoración de comedor vemos como los pequeños toques de color que aporta el negro, rompen con la monotonía del cuarto, dejando destellos de elegancia y calidad.